PRINCIPIOS IDEOLÓGICOS
Edgar Morin, pensador francés referente del paradigma de
la complejidad, se define modelo educativo de la forma siguiente: “Un modelo educativo es un conjunto de
supuestos de base agrupados en
torno a un principio organizador que define la estructura del modelo en cuestión. El principio organizador está
definido por los fines que el acto educativo persigue o el tipo de ser humano que se pretende formar. Los
supuestos de base, a su vez,
están conformados por la concepción que se tiene de la naturaleza humana y del conocimiento, así
como por las estrategias empleadas para educar que contempla el modelo”.
FEAPS asume: el concepto de
discapacidad intelectual, el modelo de calidad de vida, los valores, todo ello
centrado en la persona y en la promoción de sus proyectos de vida en un entorno
justo de convivencia en el que la persona vive y se apoya y al que la persona contribuye
a su enriquecimiento integral.
En el Código Ético de FEAPS (2004), en
su capítulo 1, se dice lo siguiente en relación a la concepción del ser humano:
“La esencia
de lo humano se asienta en la consideración de cada persona como portadora de
valor por sí misma, con poder de desarrollo y crecimiento permanentes sea en el
grado que sea, y en la consideración del ser humano como tal ser en unión del
otro. Ambos aspectos entretejidos en complejidad -la individualidad y la pertenencia
al colectivo humano- configuran la vida de cada uno de nosotros.”
M. Buber (1970) “El hecho
fundamental de la existencia humana no es ni el individuo en cuanto tal ni la
colectividad en cuanto tal. Ambas cosas, consideradas en sí mismas, no pasan de
ser formidables abstracciones. El individuo es un hecho de la existencia en la
medida en que se edifica con vivas unidades de relación. El hecho fundamental
de la existencia humana es el hombre con el hombre”. (pág.146)
La esencia de lo humano, la humanidad
plena -de todo ser humano- se gesta básicamente en tres componentes en
interacción: Poder, afecto, y valoración y respeto.
Poder:
El ser humano lo es en cuanto tiene
poder de afectar el entorno, poder de modificar su contexto vital y
sociocultural. La comunicación es una de las primeras expresiones de poder del
ser humano.
• Afecto: Ningún ser humano
puede crecer sin estar en un entorno de afecto positivo.
Valoración y respeto:
Como antes se señalaba estamos inmersos
en una cultura que durante siglos ha otorgado a la inteligencia el valor
supremo de lo humano, de modo que aquellas personas que tenían limitaciones en
su funcionamiento eran ‘minusvaloradas’. Pero cualquier ser humano lo es por
encima de sus limitaciones o competencias, y necesita la valoración en igualdad
y el respeto como ser humano pleno de las demás personas. Todas las personas
necesitamos sentir esa relación Tú-Yo
que señala Martin Buber (1998), una relación de simetría, de
reciprocidad y confianza mutua.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario